El dominó, una opción terapéutica

“El dominó es un juego de destreza y habilidad mental, donde las matemáticas y la lógica tienen un papel fundamental en el desarrollo cognoscitivo de quienes lo practican de forma habitual”.

La cita corresponde al presidente de la Asociación de Dominó de Querétaro (México), Armando Carrara, entrevistado por la agencia Notimex, a propósito de un torneo internacional organizado en el país azteca.

Diversos estudios sobre el Alzheimer revelan que este juego, y otros pasatiempos que exigen destreza mental, favorecen la prevención de esta enfermedad, así como la capacidad de asociar, coordinar, memorizar y hablar. En el año 2003, el England Journal of Medicine publicó los resultados del análisis sobre la influencia de las actividades lúdicas para prevenir la demencia, y concluyó que las personas que participaban en juegos de mesa tenían 75% menos de riesgo de desarrollar Alzheimer.

«La práctica de actividades lúdicas y recreativas favorecen la movilidad y agilidad, ejercita las  habilidades cognitivas, potencia el contacto social y la comunicación, ofrece entornos para el aprendizaje y optimiza los niveles de bienestar subjetivo», precisa un estudio denominado Proyecto LUDIMAN, desarrollado por la Asociación de Investigación de la Industria del Juguete (AIJU), también conocida como Instituto Tecnológico del Juguete, y el Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV), España.

〉 La estimulación cognitiva en pacientes con Alzheimer ralentiza el deterioro de las habilidades mentales, ya que se centra en optimizar el funcionamiento de estas, trabajando áreas como la memoria, el cálculo, la percepción y el lenguaje.

Algunas investigaciones han demostrado que, a pesar de la demencia, los pacientes con Alzheimer conservan algo de plasticidad cerebral (capacidad de aprendizaje), la cual mejora o se deteriora menos gracias a la estimulación cognitiva.

Alejandro Concha
Mireya Urzúa y María Elgueta (Izq. a der.)

De hecho, el dominó es empleado en la aplicación de terapias de memorización para personas con Alzheimer, toda vez que refuerza las habilidades sociales, la coordinación óculo–manual, la motricidad fina, la toma de decisiones a partir de la lógica, la percepción visual, las funciones ejecutivas (organización, planificación y estrategia), y estimula la memoria a corto plazo.

Nuestras actividades recreativas están orientadas a preservar la capacidad intelectual, mejorar la calidad de vida, fomentar la creatividad, las relaciones interpersonales, reforzar la autoestima, así como mantener las habilidades cognitivas y psicomotoras de nuestros adultos mayores. 

Otros juegos recomendados para prevenir el Alzheimer: